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Las historias sobre Ciencia y el medio ambiente, tienen un impacto directo sobre la vida de las personas. Escribir con claridad sobre la complejidad de estos temas, es seducir a todos los públicos sin perder un ápice de rigor periodístico. Tras un tiempo de sequía periodística, vuelvo retomar el blog, con la frecuencia de antaño. Sin embargo, en la vida surgen sorpresas y oportunidades en lo profesional que te hacen cambiar de rumbo.

viernes, 1 de febrero de 2013

LA TOXINA BT DETECTADO EN LAS MUJERES CANADIENSES EMBARAZADAS


Estudios experimentales sobre alimentación, realizado por científicos noruegos, fueron publicados en la revista PEER-REVIEWED REVISTA FOOD AND CHEMICAL TOXICOLOGY, en setiembre del 2012, evidenciando resultados preocupantes en relación al MAÍZ TRANSGÉNICO y la obesidad realizados durante un período de 10 años. El informe recomienda: “Si usted quiere evitar la obesidad, entonces evite comer maíz y productos a base de maíz transgénico y animales alimentados con granos transgénicos o Genéticamente Modificados”.

Este nuevo estudio se suma a una lista de más de 30 investigaciones en animales que muestran otros problemas, además de tóxicos o alergénicos con los alimentos genéticamente modificados. Otra investigación de EUROPEAN NETWORK OF SCIENTISTS FOR SOCIAL AND ENVIRONMENTAL RESPONSIBILITY, sobre la “Toxicidad a largo plazo del herbicida Roundup y el maíz modificado genéticamente para tolerar el herbicida Roundup” realizado por un grupo de investigadores científicos del Comité Francés para la Investigación e Información Independiente sobre Ingeniería Genética, encontraron que las ratas alimentadas frecuentemente con un tipo de maíz genéticamente de EE.UU . durante dos años desarrollaron grandes tumores mamarios, los riñones y el hígado, y otras graves de salud problemas.

Más de 30 investigaciones han revelado impactos biológicos significativos y problemas de salud como resultado de una dieta de alimentos transgénicos o genéticamente modificados. Una demostración clara es la del "MAÍZ BT", que entró en vigencia en 1990, que está equipado con un gen de la bacteria del suelo Bacillus thuringiensis , que produce la TOXINA BT -un pesticida que deshace el estómago de ciertos insectos y los mata. Las empresas de biotecnología han insistido en que la TOXINA BT no se une o interactúa con las paredes intestinales de los mamíferos ni de los seres humanos.

Los hallazgos de la investigación han demostrado que el MAÍZ BT no es seguro para el organismo humano. Un reciente artículo apenas el año pasado, publicado por los médicos del Hospital de la Universidad de Sherbrooke en Quebec, descubrieron la TOXINA BT en la sangre de mujeres y bebes canadienses que fueron evaluados. Del 93 por ciento de las mujeres embarazadas analizadas; 80 por ciento de la sangre del cordón umbilical de sus bebés, y 67 por ciento en las mujeres no embarazadas. Los autores del estudio sugieren que la ruta de exposición principal de la medida Bt fue el consumo humano, probablemente en la dieta normal de la clase media de Canadá, presente en los alimentos procesados y bebidas en forma de maíz de jarabe de alta fructosa, productos lácteos producidos por animales alimentados con maíz Bt.

 
Esta declaración sugiere que la toxina puede haber llegado por comer carne de animales alimentados con MAÍZ BT, del que comen la mayoría del ganado criado en las operaciones de alimentación de animales confinados en granjas industriales. Este es el primer estudio que revela la presencia de circulación de plaguicidas asociados a los alimentos genéticamente modificados (PAGMF) en mujeres con y sin embarazo, allanando el camino para un nuevo campo en toxicología reproductiva, incluyendo la nutrición y la toxicidad útero-placentaria

Obviamente, se necesita más investigación a lo largo de varias líneas de investigación para llegar a tales preguntas, y determinar los riesgos importantes de salud pública. Quienes tienen la última palabra son: la AGENCIA DE ALIMENTOS Y MEDICAMENTOS O AGENCIA DE DROGAS Y ALIMENTOS y el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos y las autoridades canadienses. ¿Acaso la FDA y USDA considerara esta posible vía de exposición humana, siendo estas instituciones quienes dieron luz verde para la comercialización del MAÍZ BT?


DRA. ANNA BERMEO

http://somloquesembrem.files.wordpress.com/2010/07/arisleblanc2011.pdf
Maternal and Foetal Exposure to Pesticides Associated to Genetically Modified Foods in Eastern Townships of Quebec, Canadá

Video de la Investigación:
http://www.youtube.com/watch?v=bA8dCPr5pXI&feature=player_embedded

jueves, 31 de enero de 2013

BATATA-YUCA-ALGODÓN Y MAIZ TRANSGENICO: CATALOGO DE FALLO





Los científicos del mundo, preocupados por los riesgos de los transgénicos a la BIODIVERSIDAD, LA SEGURIDAD ALIMENTARIA, LA SALUD ALIMENTARIA Y ANIMAL, firmaron una declaración con 24 delegados de 18 países africanos ante la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (2012) tras una polémica campaña publicitaria para justificar la imposición de sus productos de ingeniería genética en Europa y el Cuerno de África. Que fue difundida con el siguiente slogan: “retardar su aceptación es un lujo que nuestro mundo hambriento no puede permitirse” .En respuesta a la campaña los científicos respondieron: respondieron con una declaración a la prensa:

“Nos oponemos firmemente que la imagen de los pobres y hambrientos de nuestros países está siendo utilizado por grandes empresas multinacionales para impulsar una tecnología que no es ni segura, ecológica ni económicamente beneficiosa para nosotros. No creemos que estas empresas o tecnologías genéticas ayudarán a los agricultores a producir los alimentos que se necesita en el siglo 21. Por el contrario, creemos que va a destruir la diversidad, el conocimiento local y los sistemas agrícolas sostenibles que nuestros agricultores han desarrollado durante miles de años, y que por lo tanto va a socavar nuestra capacidad de alimentarnos a nosotros mismos. "

Según datos de la FAO, en pleno siglo XXI existen aproximadamente 850 millones de personas subnutridas en el mundo. El flagelo del hambre ha estado presente en toda la historia de la humanidad. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura ( FAO) , Organización Mundial de la Salud (OMS) y Agencia de Alimentos y Medicamentos o Agencia de Drogas y Alimentos (FDA) curiosamente siguen evaluando los alimentos transgénicos desde 1990, y esta última supone que es la que controla que se cumplan una serie de requisitos en relación a: Modificación genética: los nuevos genes no deben codificar ninguna sustancia peligrosa y ser fácilmente manipulables . Tóxicos: no pueden tener niveles de productos tóxicos por arriba de los niveles de tolerancia. Nutrientes: los nuevos alimentos no pueden ser diferentes en su composición nutritiva. Nuevas sustancias: una planta que produce una nueva sustancia que no es conocida en el mercado deberá llevar una advertencia en la etiqueta. Problemas alérgicos: deben hacer el máximo esfuerzo por minimizar la expresión de la proteína peligrosa e indicarlo en la etiqueta. Resistencia a antibióticos: FDA cree que esto es muy improbable ya que desde el punto de vista biológico una transferencia de un gen desde un alimento a una bacteria intestinal es algo desconocido por el momento, en cuanto al Etiquetado: los alimentos transgénicos deben de llevar una advertencia en la etiqueta. (Muchos países rechazan etiquetar comida transgénica)


                                         


Haciendo caso omiso a testimonios, análisis y evidencias científicas independientes como lo denunciamos en el artículo :”EL USO DEL MAIZ TRANSGENICO DAÑA LA SALUD" (http://medioambienteyperiodismo.blogspot.com/2013/01/uso-de-maiz-transgenico-amenaza-la-salud.html), que muestran evidencias claras sobre las consecuencias negativas de los transgénicos y los herbicidas asociados, el daño que causan en la degradación medioambiental , contaminando del suelo y el agua, y las tierras agrícolas contiguas, eliminando la biodiversidad; con altos costos sociales y ambientales, estas instituciones siguen evaluando el peligro de los alimentos transgénicos. Donde la sociedad civil, campesinos, agricultores orgánicos (en pequeña escala), comunidades y movimientos sociales en el mundo luchan por la soberanía alimentaria.

La agencia latinoamericana www.Alainet.org y la revista progresista “Diagonal” (España) revelaron que las movilizaciones de masas en HAITÍ rechazaron las “donaciones” de semillas híbridas, de 475 toneladas de semillas transgénicas de MAIZ y VERDURAS HÌBRIDAS, de Monsanto tras el terremoto (2010) que sufrió el país, debido a los riesgos que esta ayuda” implica para los pequeños agricultores y la soberanía alimentaria del país. Mientras que los países latinoamericanos entregaban ayuda verdadera y asistencia médica (Cuba).



ESPAÑA es el único país de la UE que cultiva transgénicos a gran escala; países como FRANCIA, ALEMANIA E ITALIA, entre otros, han prohibido la experimentación en tu territorio, basándose en el principio de precaución .La mayor parte de la gente en Europa se opone a la producción de alimentos transgénicos y varios países de ese continente ya prohibieron el maíz MON810 de Monsanto y la BATATA AMFLORA de Basf, a pesar que la Comisión Europea desaprueba esas prohibiciones. Monsanto y otras empresas de biotecnología se encuentran enfrentando demandas judiciales en Estados Unidos, entre ellas juicios con los que se pretende evitar que los cultivos transgénicos se propaguen en refugios nacionales de vida silvestre.

En ÁFRICA, la Alianza Africana por la Soberanía Alimentaria alienta a las comunidades locales a evitar el mal ejemplo que está dando Sudáfrica al adoptar esta tecnología fallida aunque se haya demostrado que las variedades de transgénicos en cuestión no responden a las promesas de resistencia a las sequías e inundaciones.

Con todos estos antecedentes siguen promoviendo los cultivos transgénicos como una forma de resolver el hambre del mundo en un momento en que la población se espera que aumente. Según los defensores de la biotecnología de la alimentación, serán una ayuda para resolver los problemas de cultivo de determinados alimentos en los países en vías de desarrollo. Pero es difícil ver cómo GM puede contribuir a resolver el hambre del mundo, cuando no existen cultivos transgénicos que son mejores que los cultivos no transgénicos a tolerar suelos pobres o difíciles condiciones climáticas. La siembra de cultivos transgénicos destruye la diversidad de los cultivos, homogeneíza los alimentos y suprime los saberes y culturas locales asociados.

La Organización de las Naciones Unidas y la Organización para la Agricultura, siguen apostando por los métodos actuales que según informan podrían alimentar a 12 mil millones personas de la población mundial, sin importar las consecuencias. Un puñado de los cultivos transgénicos como LA BATATA, YUCA, ALGODÒN Y MAIZ, han sido promovidos como proyectos entre el KARI y Monsanto como ayuda alimentaria en pequeña escala y los agricultores pobres en África, con resultados devastadores. No obstante, la cosecha ha sido escasa debido a varias plagas y a un virus que habría causado una pérdida de 80 por ciento de las mismas. Otros son el algodón resistente a los insectos y el maíz resistente a la striga, una planta parásita que destruye hasta la mitad de las cosechas en el oeste y las zonas costeras del país

La BATATA TRANSGÈNICA. Es producto de la colaboración de nueve años entre la trasnacional de la biotecnología Monsanto y el Instituto de Investigación Agrícola de Kenia (KARI), La batata resistente a virus ha sido un proyecto modelo GENETICAMENTE MODIFICADO para África, desde los años 90, por especialistas en Biotecnología de la AGENCIA DE LOS ESTADOS UNIDOS PARA EL DESARROLLO INTERNACIONAL (USAID), y la científica FLORENCIA WAMBUGU, de Monsanto encargada del proyecto en Kenya. Después de Catorce años, queda bastante claro que las batatas de Wambugu nunca lograron ingresar a los campos de los agricultores de Kenia. Los resultados de ensayos de campo muestran que fue un fracaso. La batata dulce GM sucumbió al virus fue diseñado para resistir.

En contraste, un programa de cría convencional en Uganda produjo una nueva variedad de alto rendimiento que era resistente a los virus y levantaron los rendimientos en aproximadamente 100%. El proyecto de Uganda logró su objetivo en una fracción del tiempo y menor costo del proyecto de GM. El proyecto de batata dulce GM, duro 13 años, con financiamiento de MONSANTO, EL BANCO MUNDIAL y la AGENCIA DE LOS ESTADOS UNIDOS PARA EL DESARROLLO INTERNACIONAL (USAID) por valor de $ 6 millones.

La multinacional química alemana BASF anunció este año, abandonar el mercado europeo de semillas transgénicas, reconociendo la “falta de aceptación en muchos lugares de Europa por parte de la mayoría de consumidores, agricultores y políticos”. Esto supone la retirada de la BATATA TRANSGÉNICA AMFLORA aprobada hace tan solo dos años, de la que se han cultivado apenas unas decenas de hectáreas y que, tras múltiples escándalos de contaminación, ha supuesto otro gran fracaso para la industria de los transgénicos. En ASTURIAS no se permite el cultivo de transgénicos por decisión del parlamento en 2006

La Comisión Europea decidió congelar el proceso de autorización de cultivos transgénicos en el final de su mandato en 2014, aunque sigue buscando un acuerdo entre los Estados miembros de la Unión Europea. Ocho países - AUSTRIA, BULGARIA, FRANCIA, ALEMANIA, GRECIA, HUNGRÍA, LUXEMBURGO Y POLONIA - han adoptado medidas que permitan bloquear el cultivo de OMG en su territorio

BATATA (CAMOTE) AMFLORA es considerada como un fracaso comercial, y rechazada por varios Gobiernos Europeos. AUSTRIA, LUXEMBURGO Y HUNGRÍA, han prohibido su cultivo en su territorio y junto a los Gobiernos de FRANCIA Y POLONIA han denunciado frente al Tribunal Europeo de Justicia la aprobación de esta patata transgénica. Gran parte de su cosecha se ha visto contaminada o retenida. En el 2010 fue cultivada en 267 hectáreas repartidas por SUECIA, ALEMANIA Y REPÚBLICA CHECA, con resultados negativos. Su cultivo en SUECIA se ha visto envuelto en un escándalo de contaminación por una patata transgénica no autorizada, y por lo tanto ilegal, conocida como AMADEA. Debido a esta contaminación, 16 de las 102 hectáreas cultivadas en Suecia tuvieron que ser destruidas. No han tenido mejor suerte las 15 hectáreas cultivadas en ALEMANIA, que fueron retenidas por orden de las autoridades regionales hasta poder garantizar que estaban libres de contaminación por la patata transgénica ilegal. Hasta la fecha, están retenidas en un almacén del Gobierno Federal a la espera de nueva orden.

LA YUCA (MANIHOT ESCULENTA), es originario de la Cuenca Amazónica. En países como Brasil, se ha dado un uso industrial a la yuca como fuente de biocombustibles desde hace algunas décadas. Fue promovida mediados de la década de 1990, so pretexto de paliar el hambre en África . Hoy se promociona el uso de la yuca para la producción de etanol como combustible. Proyectos de este tipo se están llevando a cabo en países tan distantes como COLOMBIA, NIGERIA, TAILANDIA, CHINA E INDONESIA. Diversos autores sugieren que este vegetal de almidón es una fuente importante de alimento, muchas familias campesinas dependen de la yuca para su sustento, además de servir como materia prima en varios procesos industriales y como fuente de alcohol carburante en gran parte del mundo en desarrollo. La yuca es cultivada en más de 90 países, constituye la base importante de la dieta de millones de personas en ASIA, ÁFRICA Y AMÉRICA LATINA

Científicos de industria de transgénicos ofrecieron transformar del cultivo de la yuca de escasas proteínas y micronutrientes, con el aumento varias características como vitamina A, proteínas, hierro y zinc, consiguiendo la proteína ZEOLIN, con lo cual su nivel de proteínas aumentaría a 12,5 por ciento. Indicaron que “un infante de dos años que obtiene la mitad de su energía de la yuca podría aumentar su ingesta de proteínas de 35 por ciento de sus requerimientos diarios a más de cien por ciento con el cambio al cultivo transgénico” Los resultados fueron publicados en PLOS ONE en el 2011, por un equipo de científicos de Estados Unidos y Puerto Rico.

El Comité de Integridad de la Investigación en DONALD DANFORTH PLANT SCIENCE CENTER llevo a cabo una investigación institucional que reveló “Que el informe publicado por los autores no confirman la presencia del gen zeolin en las plantas transgénicas de yuca en varios estudios posteriores “que una cantidad significativa de datos y documentación de apoyo que se había alegado que se produciría “No están presentes”. Por lo que la validez de los resultados no pudieron ser verificados, demostrando así que la yuca puede ser genéticamente modificada pero, no contiene la proteína ZEOLIN de proteína en los tubérculos de yuca. Recomendaron retirar el artículo publicado PLOS ONE por carecer de veracidad.

EL ALGODÓN BT es una cepa creada a través de ingeniería genética, Se presentó como la promesa que reduciría la dependencia de los pesticidas, que encarecían muchísimo la producción.

El algodón transgénico, envenena la tierra y endeuda a los campesinos. Desde hace 15 años, la ingeniería genética, también llamada tecnología del ADN recombinante, se está aplicando para obtener plantas de algodón genéticamente modificadas (GM), resistentes a insectos y tolerantes a herbicidas. En los EE.UU. los cultivos de algodón transgénico representaron el 76% de las plantaciones algodoneras durante la campaña 2003, según la AGENCIA DE LOS ESTADOS UNIDOS PARA EL DESARROLLO INTERNACIONAL (USAID) los más difundidos en el mundo son los de tipo UPLAND, producidos por los socios Monsanto y Deltapine.

Se desarrolló un algodón resistente al gorgojo con la introducción de la TOXINA BT en su configuración genética, pero que finalmente resultó un fracaso. No produjo toxina suficiente y desde entonces ha servido de alimento para los gorgojos con la amenaza de que se incremente su inmunidad. En el año 2010, científicos de China demandando evaluaciones de riesgo más exhaustivas de los cultivos genéticamente modificados, luego de descubrir un aumento de las plagas en una región con cultivos de ALGODÓN BT. La investigación duró quince años, en una región del norte de China donde diez millones de pequeños campesinos siembran casi tres millones de hectáreas y 26 millones de otros cultivos. Se reveló una amplia infestación con míridos o chinches (Heteroptera Miridae), que destruyen cultivos de fruta, legumbres, algodón y cereales. El aumento de esta plaga se relaciona directamente con los sembrados de ALGODÓN BT.

Makhatini en el sur de África se inicio el proyecto del ALGODÓN TRANSGÉNICO BT para los pequeños agricultores. Se inició con 3000 pequeños agricultores que cultivan ALGODÓN BT de Monsanto entre 1998 y 2001, con más de 100.000 hectáreas plantadas. Para el año 2002, la superficie sembrada se había estrellado a 22.500 hectáreas, una reducción del 80% en cuatro años.

Un informe de 2003 sobre el proyecto calcula que la pérdida de cosechas dejó a los agricultores que habían adoptado el ALGODÓN BT deudas de $ 1.2 millones. Otro estudio llegó a la conclusión de que el proyecto no genera ingresos suficientes para generar un "mejoramiento socioeconómico tangible y sostenible". Para el año 2004, el 85% de los agricultores que usaron para cultivar ALGODÓN BT se había rendido. Los agricultores encontraron problemas de plagas y ningún aumento en el rendimiento. Una revisión de 2012 informó que la temporada 2010/ en crecimiento, el área sembrada con ALGODÓN BT se había reducido a un minúsculo 500 hectáreas - un descenso de más del 90% de la superficie de cultivo. De esta manera, el algodón transgénico contaminó: la tierra: los químicos y fertilizantes sintéticos utilizados en la agricultura convencional, destruyeron la microflora y microfauna existentes en el suelo, y en el mediano plazo lo volvieron estéril.

LA SOJA Y MAÍZ, terminó en un desastre para los agricultores pobres en Sudáfrica. El gobierno de Cabo Oriental fue criticado por su apoyo a esta llamada "Revolución Verde", el cual se puso en marcha en 2003-2004. Un estudio de investigación por la Educación Masifunde and Trust Development Project, junto con la Universidad de Rhodes, encontró que el programa tuvo resultados desastrosos para los agricultores.

DRA. ANNA BERMEO


ISAAA, Global Status of Commercialized Biotech/GM Crops: 2010, Resumen ejecutivo - Informe 42 2010, http://isaaa.org/resources/publications/briefs/42/executivesummary/default.asp

ISAAA, Global Status of Commercialized Biotech/GM Crops: 2010, Resumen ejecutivo - Informe 42 2010. http://isaaa.org/resources/publications/briefs/42/executivesummary/default.asp

FAO, Anuario de estadísticas de la FAO 2009, FAO Roma, Ver tabla A4. http://www.fao.org/docrep/014/am079m/PDF/am079m00a.pdf


lunes, 28 de enero de 2013

USO DE MAIZ TRANSGÈNICO AMENAZA LA SALUD


                               

El maìz es un legado de las culturas prehispánicas al mundo. La evidencia de la existencia del maíz en México, data de 7, 000 años de antigüedad, encontrada por arqueólogos en el valle de Tehuacán El Perú tiene evidencia de poseer el maíz más antiguo de Sudamérica. Los resultados permitieron conocer que se sembraba maíz en el valle de Chicama tan temprano como hace aproximadamente 7200 años antes del presente; y en épocas semejantes a las más tempranas en México. Un significativo descubrimiento arqueológico en el Perú que hecha luces sobre la cronología de la evolución del maíz en la región Andina, los orígenes de la agricultura del maíz, su relación con descubrimientos similares en México y Mesoamérica y sus contextos culturales. Siendo introducida en Europa durante el siglo XVI, después de la invasión española. Actualmente es el cereal de mayor producción en el mundo, por encima del trigo y el arroz.

La existencia del maiz transgènico data de 1996 en Estados Unidos (primer productor mundial), mediante el uso de la Biotecnologìa. Donde al maíz le introducen artificialmente características biológicas nuevas provenientes de otras especies de plantas, animales o bacterias, para que adquiera capacidades inusitadas como la resistencia al uso de herbicidas, para que la propia planta adquiera la propiedad de matar insectos que la atacan o bien, que sus semillas pierdan la propiedad de reproducirse naturalmente. La técnica de producir organismos transgénicos es mediante la utilización vehículos biológicos como virus o bacterias para introducir los nuevos genes a través de cromosomas artificiales, o bien la creación del ADN sintético

Las variedades de maíz comerciales aprobadas existentes a la fecha son: MAIZ BT11 (Sygenta) MON 810 (Monsanto), MON 809 ( Pioneer Hi Bred Internacional Inc), DLL25-B16 (Aventis- Agr Evo), T14, Y25 - Chardon ll y Sheridan (Aventis- Agr Evo), MON802 (Monsanto), GA21 (Monsanto), PHI-CORN-IMI-IR (Pioneer Hi Bred Internacional Inc), CBH 351 (Aventis- Agr Evo), MS6 (Aventis- Agr Evo), MON80100 (Monsanto), 676,678,680 (Pioneer Hi Bred Internacional Inc), GA21 (Monsanto), EVENT 176 (Sygenta) DBT418 (Monsanto).

Actualmente se suman los motivos para rechazar los alimentos transgénicos, la desconfianza y el debate social continua, con opiniones controvertidas, sobre la introducción de transgénicos de la planta de maíz, en relación a la posible contaminación de cultivos de maíz nativo o de poblaciones silvestres, y la necesidad de proteger recursos genéticos y desarrollar sustentablemente la agricultura nacional y los efectos que generan en la salud de la población.


                                 


En el año 2001, científicos de la Universidad de California (UC), Berkeley, liderados por IGNACIO CHAPELA, crítico de la industria de la biotecnología; con su discípulo DAVID QUIST, quienes realizaron muestreos en la Sierra Norte de Oaxaca – México, descubrieron la presencia de cultivos transgénicos en parcelas campesinas. Publicaron su hallazgo en la revista científica internacional “NATURE”. Siendo censurados y descalificando su investigación por medios locales. Los científicos habían evidenciado la peligrosidad de la biotecnología; y habían notificado al Instituto Nacional de Ecología (INE). Estaba en curso otra investigación hecha por científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (CINVESTAV), quienes no se pronunciaron al respecto

La expansión del maíz transgénico ha causado contaminación genética del maíz en México (descubierta en 2001) Chile, Perú y Uruguay. La Federación de ecologistas y el Bloque verde de Costa Rica, están tramitando por medio del Ministerio de Cultura la DECLARATORIA DEL MAÍZ COMO PATRIMONIO CULTURAL, y a escala latinoamericana la Red por América Latina libre de transgénicos gestiona para que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, UNESCO, DECLARE EL MAÍZ PATRIMONIO DE IGUAL FORMA

En el 2008, una investigación, patrocinado por los Ministerios de Agricultura y Sanidad de Austria- realizada por el DR. JÜRGEN ZENTEK, Profesor de Medicina Veterinaria en la Universidad de Viena, revela las graves amenazas para la salud por consumo de maíz – de organismos modificados genéticamente. Este estudio es uno de los escasos realizados en ratones a largo plazo. Concluye que “los alimentos transgénicos parecen actuar como un agente de control de la natalidad, conduciendo de forma potencial a la infertilidad“, pudiéndosele atribuir a las diferencias en la alimentación. Esta variedad de maíz, propiedad de Monsanto, es tolerante a un herbicida y resistente a algunos insectos. Ha sido aprobada para su cultivo en varios países, como EE.UU. ARGENTINA Y EN LA UNIÓN EUROPEA para la alimentación humana y animal. La variedad NK 603 x MON 810 es un híbrido de dos variedades transgénicas. Una de ellas, MON 810, se cultiva de forma comercial en España, con más de 80.000 hectáreas sembradas en 2008.

En MÈXICO, se cultiva el maíz transgénico hace varios años. El Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (SENASICA), informo que la liberación de los organismos genéticamente modificados (OGM) se realiza con total apego a las leyes, en específico, a la de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM). Se cultivan miles de variedades nativas de polinización abierta y la población consume grandes cantidades de maíz de manera directa, poniendo a la población en riesgo, por la exposición de una agricultura transgénica. Las autoridades mexicanas han permitido la importación de más de 70 productos que contienen maíz genéticamente modificado. En octubre del 2012 la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) pronosticó que la empresa Monsanto podría poner a la venta en México su maíz transgénico para uso alimenticio

La Organización Mundial del Comercio (OMC- 2007-2008) considera prioritario el libre mercado. Tres principales productores de maíz transgénico MON 810 (cultivadas en España), T25 (EE UU, Canadá y Argentina) demandaron a la Unión Europea por las restricciones a la importación y el cultivo de maíz modificado genéticamente; forzando a la Comisión a emprender iniciativas para la revocación de restricciones (Etiquetado) en algunos de los países miembros. AUSTRIA (2009), ALEMANIA, BELGICA, HUNGRIA, FRANCIA y GRECIA, MANTIENEN LA PROHIBICIÓN DE CULTIVAR MAÍZ TRANSGÉNICO dentro del territorio nacional, a pesar de los intentos de la Comisión Europea de levantar el veto a los organismos genéticamente modificados. Cabe indicar que AUSTRIA no se encuentra libre de transgénicos, 1,2 millones de personas, firmaron el referéndum del 1997, que manifiesta que los agricultores austriacos utilizan soja modificada genéticamente como alimento principal para sus animales. Países como GRECIA, ALEMANIA, FRANCIA, AUSTRIA, HUNGRÍA Y LUXEMBURGO, han aplicado el principio de precaución y no aceptan este tipo de alimentos hasta que no se realicen estudios más exhaustivos que determinen su seguridad

En el 2009, el Biólogo Molecular DR. GILLES-ERIC SÉRALINI, experto de la Comisión Europea en transgénicos. Especialista en toxicidad de variedades transgénicas y herbicidas, denunciaba que “los transgénicos son tóxicos para la salud humana”; y los encontramos en alimentos que contienen soja o maíz por ejemplo azúcar de maíz (sodas, bebidas de cola, pastelería, salsas, bombones, caramelos, chocolate…). Y los animales que nos comemos que han sido alimentados con maíz transgénico (pollo, vaca, conejo, cerdo, leche, huevos…)

En el 2012, aparece una nueva investigación, realizada en un periodo de dos años, por investigadores franceses, liderado por el GILLES-ÉRIC SÉRALINI. Difunden el informe en la revista científica FOOD AND CHEMICAL TOXICOLOGY , donde evidencia la toxicidad del maíz transgénico NK603 en la salud de varios grupos de ratas alimentadas durante dos años con el maíz modificado genéticamente y/o el herbicida asociado Roundup. Los investigadores encontraron anomalías, con “mayor incidencia de tumores mamarios y problemas hepáticos y del riñón, además de comprobar una esperanza de vida menor en los animales”. Cabe indicar que la mayor mayor parte de los estudios realizados para conocer los efectos a largo plazo son por propia industria biotecnológica, por periodos de 90 días.

2013, Agencia de Seguridad Alimentaria de la Unión Europea (EFSA), se manifestó sobre el estudio realizado por GILLES-ERIC SÉRALINI, sobre la peligrosidad del maíz transgénico NK603. Consideran las conclusiones de la investigación como no concluyentes. Un grupo de periodistas franceses realizan un pequeño reportaje (20 minutos) donde develan los estudios que demuestran la toxicidad del maíz transgénico de Monsanto. Cabe mencionar que el video fue censurado por el gobierno francés, pero puede verlo subtitulado en este enlace: http://vimeo.com/41182807

En el 2013, el Doctor MIGUEL ALTIERI, profesor de la Universidad de California, Berkeley Universidad de California, investigador del tema agroecológico, e investigador visitante para la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación; evidenció que la biotecnología moderna aplicada a la agricultura no acabó con el hambre en el mundo. Según el investigador en los 20 años que se probó esa tecnología, evidencian riesgos significativos de producción de semillas biotecnológicamente manipuladas (transgénicos); indicó que más de 58 millones de hectáreas, condenan a los agricultores al monocultivo, a la homogeneidad genética, y, por lo tanto, a la vulnerabilidad ecológica de sus sistemas.

Indico además que estos cultivos producen impactos ambientales de consecuencias graves, tales como la CONTAMINACIÓN GENÉTICA de variedades locales, la CREACIÓN DE SUPERMALEZAS al traspasarse el gen resistente al glifosato a malezas emparentadas al cultivo. La APARICIÓN DE PLAGAS DE LEPIDÓPTEROS RESISTENTES al Bt; como así también los IMPACTOS SOBRE BIOTA DEL SUELO y ELIMINACIÓN DE INSECTOS BENÉFICOS.

Datos del informe de la UNION OF CONCERNED SCIENTISTS (UCS), demuestra que Monsanto falló en mejorar la agricultura; el DR. ANTONIO SERRATOS, critica desde la agronomía el uso de maíz transgénico en cultivos de maíz de Milpa Alta y Magdalena Contreras. Lanzo un llamamiento para que científicos de todo el mundo exijan al Gobierno Mexicano que no apruebe la siembra comercial de maíz transgénico, así como la revocación de todos los permisos a campo abierto de esta semilla manipulada genéticamente, aprobados a escala “experimental”. La Revista FRONTIERS OF ECOLOGY AND THE ENVIRONMENT, de la Sociedad Norteamericana de Ecología, indicaron que la propaganda de Monsanto, sobre los logros importantes incluyen: ALIMENTACIÓN DE UNA POBLACIÓN EN CRECIMIENTO, PROTECCIÓN DE LOS RECURSOS NATURALES Y PROMOCIÓN DE LA BIODIVERSIDAD, El científico mexicano considera tales “aseveraciones exageradas llenas de mentiras”. De acuerdo con el informe de la UCS, las prácticas agrícolas promovidas por Monsanto no son sustentables e impiden la implementación de soluciones adecuadas para los retos de alimentación y agricultura que se requieren en momentos de crisis ambiental y ecológica.

La aprobación para producir semillas de maíz genéticamente modificadas, se da a pesar las investigaciones científicas que evidencian daños en la salud y en el medio ambiente. A pesar de la oposición de organizaciones campesinas, indígenas, académicas, patrimoniales y ambientales que han manifiestan su preocupación sobre temas económicos, sociales, ecológicos, de patentes, salud y soberanía alimentaria. Algunos países miembros de la Unión Europea han prohibido el cultivo de MAÍZ TRANSGÉNICO dentro de sus territorios. La solución no es sencilla, pues priman los intereses políticos, económicos y privados, que aseguran que la tecnología es segura, dejando de lado las consideraciones sociales y ambientales; lo cual puede desencadenar en una seria amenaza con riesgos y peligros irreversibles en seguridad alimentaria. Bastaría con aplicar la herramienta internacional sobre responsabilidad por daños causados por transgénicos: PRINCIPIO PRECAUTORIO del Protocolo de Bioseguridad de Cartagena y en la Ley de Bioseguridad, con un estudio a largo plazo, con investigadores internacionales.


DRA. ANNA BERMEO

http://www.cec.org/Storage/56/4839_Maize-and-Biodiversity_es.pdf