Si bien la televisión sensacionalista
nos ha acercado a los horrores cotidianos de nuestra sociedad, nada sorprende
tanto como la muerte intencional de un niño que causa reacciones de shock y horror
de la mayoría de miembros de la sociedad, situación que exacerba en gran medida
cuando el asesino es el padre o la madre del niño.
Uno de cada 8 niños es maltratado en
Estados Unidos, más del 12 por ciento de los niños son víctimas de golpes,
negligencia o abuso sexual o emocional. Estados Unidos tiene la tasa más alta
de homicidio infantil entre las naciones desarrolladas. Es la cuarta causa
principal de muerte entre las edades de 1 a 11. El perpetrador común de
homicidio infantil es uno de los padres (Filicidio); el mayor riesgo para el
niño está en el primer día de vida. Un estudio de Carolina del Norte evidencia
que 2,1 por cada 100.000 bebés fueron asesinados en el primer día de vida. En
la infancia, la tasa estadounidense de homicidios es de 8 por cada 100.000,
superior a la de Canadá en el 2,9 por 100,000 según el Comité de Revisión de la
muerte de Violencia Doméstica de Canadá. Durante los años preescolares, las tasas son
2,5 por 100.000. En los años de escuela, disminuye a 1,5 por 100,000, Según el
Dr. Phillip Resnick, director de psiquiatría forense en la Universidad Case
Western.
El Filicidio ha sido registrado en toda
la historia; y es definido como el acto deliberado del progenitor matando a su
propio hijo, las investigaciones se centran en tipos de filicidio; algunos
autores hacen referencia al infanticidio, definido legalmente en varios países
como el asesinato de un niño; Neonaticidio (Porter & Gavin, 2010) un
término que describe la muerte de un niño a mano de los padres las primeras 24
horas después del nacimiento; el Infanticidio,
implica la muerte de un menor de 1 año de edad; y filicidio, es el asesinato de un niño y hasta 18 años de
edad perpetrado por el padre /o madre.
Aunque el infanticidio se convirtió en
delito en la ley romana en el año 374 d. C., los infanticidas raramente eran
juzgados. En el siglo XVI, algunos países europeos promulgaron leyes
considerando el filicidio como una ofensa capital. Pero en 1922 (enmendada en 1938), Gran Bretaña redujo
las penas por filicidio materno, basado en la presunción de desequilibrio por
efectos del alumbramiento.
Phillip J. Resnick, profesor de
psiquiatría en la Escuela de Medicina de la Universidad Case Western Reserve
clasifica cinco motivos básicos de filicidio: "filicidio altruista,"
cuando una madre mata en la creencia de que está salvando a su hijo de un
destino peor que la muerte; "Filicidio aguda psicótica", en la que
una madre obedece voces o alucinaciones que la mandan a hacerlo; "Filicidio
maltrato fatal", en la que un niño muere a causa de abuso o negligencia; y
"filicidio hijo no deseado", en la que una madre se deshace a sí
misma de un niño que percibe como un obstáculo.
La literatura internacional se ha
centrado en términos generales en el Filicidio materno, donde se evidencia que el
40-50% de los casos, homicidios-suicidios que involucran a niños menores de 10
son cometidos por las madres, siendo los resultados a menudo contradictorios; pocos
estudios han comparado sistemáticamente las similitudes y diferencias en los
casos de madres y padres que matan a sus hijos; trabajos recientes en Australia
(Eriksson, Mazerolle, Wortley, y Johnson, 2014), los Países Bajos (Liem y
Koenraadt, 2008), y los Estados Unidos (Dixon et al., 2013) han comenzado a hacer
frente a este vacío; siendo además un problema que trasciende fronteras.
Los resultados de las investigaciones
varían entre países, ya sea por diferencias culturales, legales u otras. Alemania
se ha visto sacudida por casos de asesinatos de bebés en los últimos tiempos, en
un momento cuando el estado impulsa una legislación para animar a la gente a
tener más hijos. A pesar del fuerte sistema de bienestar social que ayuda a las
madres solteras; con métodos anticonceptivos y educación sobre anticoncepción y
la libertad de uso; la tasa de madres alemanas asesinando a sus hijos no es más
alto que en el resto de Europa.
Si bien la inestabilidad mental y / o
falta de control es el factor considerado subyacente de la mayoría de los
homicidios, el filicidio o no, dependerá de las circunstancias y el entorno
social. En la India, hasta el siglo XIX, el filicidio fue asociado al sistema
social de castas. El asesinato de un bebé (por lo general es una niña), está asociado
a una carga financiera, existencia de castas, o un crimen de honor. La mayoría
de ellos suceden con mayor frecuencia en la India rural.
Es interesante notar que las mujeres
cometen menos del 13 por ciento de todos los delitos violentos, pero cometen un
50 por ciento de todos los asesinatos de Filicidio. Sin embargo, para los
tribunales de los países occidentales las mujeres que matan a sus hijos son
consideradas generalmente enfermas mentales, mientras que los hombres que lo
hacen son considerados criminales. Con mayor frecuencia las mujeres que
asesinan a sus hijos están "hospitalizadas o tratadas”, mientras que los
hombres que lo hacen son encarcelados de forma desproporcionada, incluso
ejecutados.
Durante las últimas tres décadas los
padres estadounidenses han cometido filicidio alrededor de 500 veces al año.
Los casos terribles son a menudo poco conocidos, un estudio publicado en la
REVISTA FORENSIC SCIENCE INTERNATIONAL (Ed. marzo 2015) proporciona el primer
análisis estadístico completo de filicidio en los Estados Unidos, de 632,017
arrestos entre 1976 y 2007, 15.691 de casos (2,5 por ciento) eran filicidios. Los
datos muestran que los hombres son tan propensos como las mujeres de matar a
los bebés.
El estudio de la OFICINA FEDERAL DE
COMPLEMENTARIO DE HOMICIDIOS INFORMES (SHR) también explora posibles
fundamentos psiquiátricos y biológicos subyacentes de filicidio. Entre 1976 y 2007,
de 94,146 casos (14,9%) fueron filicidios. Los niños varones eran más propensos
a ser asesinados (58,3%) que las niñas.
En general, los padres eran los acusados
de asesinato en 57,4% de las veces. Los datos permitieron a los
investigadores determinar los escenarios de filicidio más comunes. Que un padre
mate a un hijo era el más probable en un 29,5% de los casos; y una madre en un
22,1%. Una madre tiene más probabilidades de matar a una hija (19,7% de los
casos) que un padre (18,1%).
Son innumerables de los casos de
filicidio registrados, los más sonados son de Claudia Mijangos (México. 1989), Dominique
Cottrez (Francia, 2010), Alexandra Tobias (EEUU, 2010) Lacey Spears (EEUU, 2014)
José Bretón (España, 2011) entre muchos otros.
En general, los factores de personalidad
(enfermedades mentales), condiciones
ambientales (pobreza), influencias
hormonales, privaciones
afectivas durante la infancia, violencia familiar son condiciones que pueden motivar
el filicidio; necesario realizar mayores investigaciones en el área para mayor comprensión
del tema, para encontrar formas efectivas para identificar a los niños en
situación de riesgo, y prevenir el daño y muertes de niños futuro. Los
científicos creen que las situaciones filicidio-suicidio se pueden prevenir
mediante una mayor sensibilización de la comunidad de la enfermedad mental.
ANNA BERMEO